«Labor with hope» se ha convertido en uno de mis libros favoritos. Lo compré cuando me enteré que estaba embarazada porque quería leer un libro que apuntara al Evangelio durante esta etapa; pero creo que es un libro que TODA mujer cristiana debe leer. Ya sea que esté cerca de de tener hijos o no, tenga hijos, esté luchando con la infertilidad, sirve hasta incluso para aquellas que han perdido a sus hijos.
Actualmente solo está en inglés pero espero que lo traduzcan pronto porque Gloria Furman, la autora, ya tiene otros libros traducidos al español. Aún así quiero compartirlo porque es una joya. Este libro me ayudó a romper muchos estigmas que tenía de la maternidad y la labor de parto. Como dice el libro: «A veces la forma en que nos sentimos o lo que creemos del embarazo y el parto son más reflejos de nuestras ideas equivocadas, valores culturales, preferencias personales o hasta mentiras evidentes de la boca del infierno». También ayuda a encontrar esperanza y consuelo en Jesús a quienes lo necesitan: «¿Qué corazón puede soportar el dolor de una cuna vacía o una mecedora vacía? El consuelo que necesitamos se puede encontrar al mirar a la tumba vacía».
La teología detrás de la maternidad
«Labor with hope» está compuesto por 25 capítulos cortos o meditaciones sobre el embarazo, labor de parto y la maternidad. En cada uno de ellos Gloria y su coautor Jesse Scheuman nos enseñan cómo se ven estas tres áreas a la luz de la Biblia y tocan muchos otros temas como: la maternidad espiritual, la infertilidad, el por qué tener hijos, cómo el Evangelio es la cura para la epidemia del aborto, cómo el sufrimiento de una mujer en labor de parto nos apunta a la redención, y más.
Mis frases favoritas
Aquí te dejo con algunas de mis frases favoritas para que te animes a leer el libro:
«La gran idea de Dios de que Su gloria llene la Tierra para que todos la disfrutemos: ‘hacer bebés que harán más bebés’ nos apunta al discipulado; la descendencia del Siervo Sufriente, pequeñas versiones de Jesús correteando, pasando el Evangelio a aquellos que pasarán el Evangelio. Nuestra fertilidad espiritual y biológica es para la gloria de Dios y no la nuestra».
«Nuestro multiplicado dolor al multiplicarnos está destinado a apuntarnos a una realidad teológica profunda: necesitamos un Salvador».
«El aborto pervierte la misericordia y la justicia a través del sacrificio infantil: tu vida por la mía. Pero el autosacrificio de Jesús ejemplifica la misericordia y la justicia perfectamente: mi vida por la de ellos».
«En la maternidad, la mujer imita la gran narrativa de la redención, mientras ella experimenta mil muertes para dar vida a su hijo día y noche».
«Una madre en la agonía del parto nos ayuda a entender que el sufrimiento de esta vida es inmensamente superado por el gozo que experimentaremos en la resurrección».
«La fertilidad, concepción, embarazo y parto, son parte de la misericordia de Dios. No nos las hemos ganado o alcanzado. ¿Qué tenemos que no hemos recibido de Dios? ¿Así que por qué nos jactamos de estas cosas?»
«Los bebés chupándose el dedo en el ultrasonido están diseñados para dirigir nuestros corazones a alabar a Dios. Los surcos delicados en la huella del dedo de tu niño adoptivo en su pasaporte están diseñados para dirigir tu corazón a alabar a Dios».
«A través de nuestros partos maternales Dios nos está enseñando a glorificarlo en todas las cosas y a unirnos al ensordecedor y estruendoso aplauso del cielo cuando los santos se postren ante el Cordero a quien corresponde toda la gloria, dominio, poder y autoridad… La angustia será olvidada cuando nuestra fe sea transformada en vista».
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