Hacer repostería es más una ciencia que un arte y no a todos le sale bien de la primera. Yo dañé bastantes recetas cuando estaba comenzando, pero me encantaba así que seguí practicando y fui aprendiendo muchas cosas en el camino. ¿Eres de las que no le queda ninguna receta bien? Aquí te dejo algunos tips que he ido aprendiendo con los años que he estado haciendo repostería:
- Lee la receta antes de comenzar. Puede parecer tonto, pero en la repostería el orden de los factores sí altera el producto, así que asegúrate de leer todo primero para no cometer errores.
- Saca los ingredientes desde el principio. Así puedes estar segura de que tienes todo y también hace que se te haga más fácil seguir la receta.
- Sigue las instrucciones al pie de la letra. A menos que seas más experta, trata de no cambiar ningún ingrediente o las medidas de algún ingrediente. Eso puede hacer que el resultado sea diferente.
- No cambies las porciones de la receta. No trates de hacer la mitad de la receta, a menos que ya la hayas hecho antes y tengas más confianza porque veces no queda igual. Si vas a hacer el doble, haz la receta dos veces en lugar de mezclar todos los ingredientes juntos.
- Usa la prueba del palillo. A veces podemos ver los bizcochos o brownies listos por fuera pero pueden estar crudos por dentro. Inserta un palillo en el centro para revisar si están bien cocidos.
- Usa la prueba de los bordes dorados. Cuando horneas galletas o recetas con masa (pies, pizza, cinnamon rolls…) siempre es mejor llevarse de que los bordes queden dorados en lugar del reloj.
- No abras el horno antes de tiempo. Sobre todo si estás haciendo recetas donde la masa tiene que subir. Abrir el horno puede generar un cambio de temperatura y hacer que la masa no suba. Mejor enciende el bombillo del horno si quieres ver cómo va quedando y luego que esté casi terminando, puedes usar la prueba del palillo.
- Siempre precalienta el horno en la temperatura que te pida la receta. Así no se afecta el tiempo que debes de dejar tu plato cocinando.
- Si la receta dice que enfríes la masa, no te saltes ese paso. A veces hace toda la diferencia.
- No todos los hornos calientan igual. Algunos hornos pueden tener un margen de error de varios grados. Si quieres asegurarte de que está bien, compra un termómetro de horno.
- Tu plato se cocinará diferente dependiendo de la altura de la parrilla del horno. Siempre trata de ponerlo en la parrilla del centro o un poco más arriba. Si lo pones muy cerca del fondo se puede quemar la parte de abajo.
- Los moldes de diferentes materiales hacen que la comida se cocine a diferentes velocidades. Por eso siempre usa el palillo o estar atenta a los bordes como dijimos más arriba.
- Usa la mantequilla y los huevos a temperatura ambiente a menos que la receta pida mantequilla fría. Si los guardas en la nevera, sácalos un poquito antes de comenzar a hacer la receta.
- Siempre espera a que el molde esté frío para desmoldar. Si desmoldas cuando aún está caliente, puedes correr el riesgo de que se te rompa la masa.
- Google y YouTube son tus mejores amigos. Si no sabes cómo hacer alguna parte de la receta, Google o YouTube te pueden enseñar cómo hacerlo: desde cómo dorar mantequilla hasta amasar.
¿Te gustaron estos tips? ¿Te quedaron dudas? Déjamelas abajo en los comentarios.
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